Obispos cubanos critican el nuevo Código de las Familias

El régimen cubano inventó una nueva forma de angustiar y preocupar a los ciudadanos de la isla. En esta ocasión se trata del reciente Código de las Familias. Una legislación que autoriza a los niños -sin importar lo que piensen sus padres- a cambiar su sexo. Al respecto los obispos antillanos se pronunciaron y formularon duras críticas a esta inédita imposición legal.

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“Cuba, cuida tus familias, para que conserves sano tu corazón”, con esta frase pronunciada por San Juan Pablo II en su discurso en Santa Clara -el 22 de enero de 1998- comienza el comunicado de los clérigos de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, destacó ADN America.

Con estas palabras los obispos cubanos dan a conocer su postura con respecto al cambio de sexo de los niños sin el consentimiento de sus padres o representantes.

Los sacerdotes católicos se oponen -frontalmente- a que los infantes decidan operarse y alterar su sexo sin el permiso de sus progenitores. Además, no están de acuerdo con la «ideología de género».

Luego, en otro párrafo del comunicado -para reafirmar su postura- los clérigos citan a José Martí.

El héroe de la isla aseguró: “El amor es la adhesión ardorosa e incondicional que un individuo de un sexo siente respecto a un individuo del otro. La diferencia de sexos es, no sólo su cualidad, sino su esencia característica”.

La reunión de los obispos / Captura desde ADN AMÉRICA

Obispos critican la nueva imposición legal de la dictadura castrista

¿Por qué los obispos critican la nueva imposición legal de la dictadura? Los sacerdotes católicos aseguran:

“No es verdad que lo más beneficioso para los niños y adolescentes sea introducir una interpretación del principio de “la autonomía progresiva”, aseguran los obispos.

El Código de las Familias implica la posibilidad de que los infantes -sin el permiso de sus progenitores o representantes- puedan asumir toda la responsabilidad que supone ser someter a una operación clínico-quirúrgica irreversible.

Ese tipo de operación va a determinar su situación existencial o de identidad, para lo cual «no están preparados”, destaca el comunicado de los obispos cubanos.

¿A que otros aspectos se oponen los obispos?

Asimismo, en el comunicado los obispos aseveran que se oponen a que los homosexuales adopten niños.

Al respecto escribieron:

“La adopción es esencialmente un modo de conceder al niño por ley, lo que por naturaleza le corresponde y necesita: un padre y una madre».

Estos fundamentos «también son aplicables a no admitir la pluriparentalidad, la aplicación de técnicas de reproducción humana asistida a parejas del mismo sexo o, incluso, la fecundación in vitro postmortem, por la que un niño nacería intencionalmente huérfano de padre. Todo hijo es un don y un fin en sí mismo; es un derecho del niño tener un papá y una mamá».

Para sustentar su opinión destacaron un argumento de José Antonio Saco: “El amor y respeto que los hijos tienen a sus padres, dan a éstos sobre el corazón de aquéllos un ascendiente que los hace ser sus mejores institutores”.

¿Qué pasa con el matrimonio homosexual?

Con respecto al matrimonio homosexual, los obispos cubanos aseguraron:

“El matrimonio entre hombre y mujer, que es la base natural de la familia, no puede ser desplazado o deformado para dar paso a otras maneras construidas legalmente”.

Los obispos destacaron que la dictadura castrista no consideró la opinión de la mayoría de los ciudadanos cubanos al aseverar:

“Vemos con desilusión que éstas y otras propuestas que resultaron notoriamente cuestionadas por parte de la sociedad, siguen intactas en el Código que se presenta ahora a referendo”.

Desafiando frontalmente al régimen castrista, los obispos apelaron:

“A la conciencia y a la responsabilidad de todos los cubanos, creyentes o no, a que tengan en cuenta a la hora de votar lo que les dicte su conciencia, su fe, sus convicciones y principios, pensando no sólo en las generaciones actuales, sino también en las futuras, y en el bienestar espiritual y material de todos los cubanos”.

Fuente: ADN AMÉRICA.