Miami, Florida – A pesar del entusiasmo reciente de los demócratas en torno a la campaña de la vicepresidenta Kamala Harris, no se puede afirmar que ella tenga una clara ventaja sobre el expresidente Donald Trump. Si bien Harris lidera las encuestas nacionales por un margen de aproximadamente 3 puntos porcentuales, la elección presidencial no se decide por el voto popular, sino por el Colegio Electoral. Esto significa que tanto Harris como Trump necesitan ganar la mayor cantidad de estados clave posibles para obtener la victoria.
Hasta el martes al mediodía, los promedios de encuestas estatales de publicaciones como Silver Bulletin, Real Clear Politics, FiveThirtyEight y The New York Times indican que las contiendas en los estados decisivos son extremadamente reñidas.
Wisconsin y Michigan parecen ser los mejores estados para Harris, con un margen a su favor de entre 1 y 3 puntos porcentuales según los promedios de las cuatro fuentes mencionadas. Sin embargo, estos estados por sí solos no le darían a Harris una mayoría en el Colegio Electoral.
La situación es más incierta en Pennsylvania, Georgia, Nevada y Arizona. Aunque algunos promedios muestran a Harris ligeramente por delante en estos estados, con menos de 1 punto porcentual, otros indican empates en Pennsylvania y Nevada, o pequeñas ventajas de Trump en Arizona y Georgia.
En el último estado clave, Carolina del Norte, Trump lidera los promedios de encuestas por un margen muy estrecho, de menos de 1 punto porcentual.
En resumen, los datos sugieren que la contienda es muy cerrada y ninguno de los candidatos ha logrado obtener una ventaja clara.