¿A qué le temen? También negaron solicitud a protestar el 15N a residentes de Santa Clara
Así como sucedió con La Habana, también autoridades negaron a residentes de Santa Clara, en Villa Clara, a participar en las protestas ciudadanas pautadas para el 15 de noviembre.
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Esto tras la solicitud que hicieron ciudadanos de esta localidad para participar en la llamada «Marcha Cívica por el Cambio».
La respuesta, que no cambió ni una coma a la misma que dieron en La Habana Vieja, fue firmada por el intendente de ese municipio, Eduardo Andrés Román Duarte.
En la misma se exponen los mimos calificativos de «inconstitucionales» y «desestabilizadores» que se dieron en la respuesta del municipio La Habana Vieja, en la capital del país.
«No se reconoce legitimidad a las razones»
También esta misiva dirigida a la ciudadana Sayli González Velázquez arguye que el artículo 56 de la Constitución, citado como principal sustento de la solicitud para esta manifestación pacífica, dispone entre los requisitos para el ejercicio de la misma «el respeto al orden público y el acatamiento a las preceptivas establecidas en la ley», y consideran que ese apartado no se tuvo en cuenta al organizar la marcha.
Igual añaden que «no se reconoce legitimidad en las razones que se esgrimen para la marcha», al tiempo que estima que la proyección pública de algunos de los promotores «con organizaciones subversivas o agencias financiadas por el gobierno estadounidense», tienen «la intención manifiesta de promover un cambio de sistema político en Cuba».
En esta respuesta, que la difunde en su perfil de Facebook el usuario que se identifica como Jorge Villaclareño García, vuelven a calificar a la marcha como una «provocación», que forma parte de una «estrategia» para desatar un cambio de régimen en Cuba, además de aludir el apoyo público que recibió de legisladores estadounidenses y medios de prensa que -según dicen- «intentan desestabilizar el país e instan a la intervención militar».
La carta del intendente de Santa Clara concluye que “si bien se invoca un derecho constitucional, este no puede ejercerse en contra de los demás derechos, garantías y postulados de la propia Constitución», y por ese motivo dictamina el «carácter ilícito» de la marcha.
Fuente: Ciber Cuba
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