No hay pan, pero sí circo: 8vo congreso del PCC
No hay pan, pero hay mucho circo. El socialismo cubano ha destruído la economía y las esperanzas de la isla. En 1954, de acuerdo con los datos oficiales, Cuba tenía una vaca por habitante y era tercero en Latinoamerica en consumo de carne por cápita. Cuba también era el segundo país latinoamericano con la tasa más baja de mortalidad infantil y analfabetismo.
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En 1957, las Naciones Unidas también reconocieron que Cuba era el primer país latinoamericano con mayor número de médicos per cápita. Tenía también el mayor porcentaje de casas con electricidad y con baños baños internos. Cuba, en 1958, ocupaba el puesto veintinueve en las mayores economías del mundo. No es la sombra de lo que es hoy en día.
La revolución cubana acabó literalmente con el país y lo volvió uno de los más pobres y atrasados del mundo. No parece haber esperanza para la isla.
De acuerdo con los datos manejados por la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba, la isla se ha visto empobrecida, desigual y represiva durante los 62 años de la dictadura comunista.
El otro dilema es que Cuba no es manejada por el Partido Comunista de Cuba, sino por unas pocas familias que conforman mafias. Toda la estructura responde y obedece la voluntad de estas mafias familiares.
Así, Cuba actualmente no es un régimen comunista, sino un estado mafioso. Este es un concepto que se aplica actualmente a regímenes como los de Cuba y Venezuela. En estos dos países, las mafias han secuestrado todas las instituciones y el Estado. Los cuerpos represivos y las fuerzas armadas responden a las mafias y a sus intereses políticos. También se han abolido las libertades, los derechos humanos, las leyes y la posibilidad de tener elecciones democráticas o libres.
